BUENOS DÍAS - VIERNES - 21 DE OCTUBRE DE 2022

 Comenzamos con nuestro saludo al Señor: En el nombre del Padre…

Abrimos camino hacia los más necesitados: Misiones Salesianas

¡Ya es viernes! Y nos encontramos en plena campaña del DOMUND. Durante esta semana hemos compartido momentos muy bonitos en los que hemos podido abrir los ojos para ver la realidad de otras personas. Además, pudimos ver un video en el que comprobamos el trabajo tan valioso que hacen los misioneros. Pero hoy, ahora, justo donde te encuentras, te invito a que pares, reflexiones y pienses: 

¿Puedo yo ser misionero en mi día a día? ¿Cómo podría hacerlo?

Todos podemos ser misioneros en nuestra vida cotidiana. Soy misionero cuando me acerco a un compañero/a que necesita ayuda, cuando me siento a escuchar porqué alguien se encuentra triste, cuando abrazo de corazón a mi familia o amigos... Ser misionero también es saber no mirar hacia otro lado ante los problemas de los demás. Cuando somos empáticos y actuamos con el corazón, estamos siendo misioneros de amor y solidaridad.

En ocasiones, cuando pensamos en el trabajo que realizan los misioneros, (por lo general) pensamos en la ayuda que ofrecen a familias y niños en países de África. Los salesianos son también misioneros en muchos lugares del mundo, y por eso os quiero compartir este video, para que veamos otra manera de ser misionero, pero siempre compartiendo algo en común: EL AMOR HACIA DIOS Y HACIA LOS DEMÁS.

EN MEMORIA DE HÉCTOR

El pasado miércoles recibimos la noticia de que nuestro compañero Héctor Alanís nos había dejado para ir al cielo. Fue un día muy difícil y están siendo días complicados para todos. Muchos de nosotros hemos tenido la gran suerte de conocerlo y hemos disfrutado de todo lo bueno que tenía para ofrecer. Si por algo se ha caracterizado siempre, es por esa alegría tan inmensa y contagiosa que lo acompañaba. Su pasión cofrade, sus ganas de bailar y ayudar a los demás, y todas las sonrisas que nos regaló, son sin duda, el mejor que recuerdo que podemos guardar de él. 

"Gracias por elegirme como madre, gracias por el amor infinito que me has dado" ha dicho su madre en estos momentos tan complicados. Héctor, tu cole siempre te recordará, siempre quedarán los buenos momentos compartidos, las risas, la alegría...tu alegría... Qué suerte haberte tenido como alumno. Hoy mandamos todos unidos un beso al cielo, brilla como solo tú sabes hacerlo.

ORACIÓN

Hoy nuestra oración va dedicada a ti, Héctor. Que María Auxiliadora y tu Virgen de la Aurora te cubran con su manto. "Al dejar esta vida...llévame al cielo".

Te pedimos que nos ayudes desde arriba a ser tan alegres y felices como tú. Pedimos también por tu familia, para que Dios les dé fuerza, esperanza y puedan sentirse acompañados por todos nosotros. Siempre estarás en nuestros corazones.

Te lo pedimos rezando: Dios te salve, María...

María Auxiliadora de los cristianos: Ruega por nosotros.

AVISOS

RECORDAD QUE HOY... ¡SEGUIMOS CON EL DULCE SOLIDARIO!